lunes, 21 de abril de 2014

ENTREVISTA: MARTÌN NEGRO


Guitarrista Argentino con una querencia hacia el jazz, la música culta y los aromas españolados, su sonido suma en esencia a varias tradiciones sin contradecir a ninguna.
Todo construye a la hora de poder elegir y mostrar al mundo un trabajo fino con una estética cuidada de sonido limpio en la ejecución que constituye el factor determinante sobre el que orbitan otros instrumentos de carácter ecléctico. Una interviú que nos deja ver un  sólido testimonio de su temprana experiencia.

IDJ. ¿Cómo comenzó tu carrera?

MN. Creo que los músicos tenemos 2 visiones en ese aspecto, es decir: cuando empezamos a vivir de la música y la otra es la parte artística. En lo laboral en el 98  hice un viaje a México donde estuve viviendo 1 año y trabaje mucho. Es una ciudad con muchas oportunidades, tanto para el jazz como para la sesión, tuve la suerte de trabajar con artistas de la talla de Ely Guerra y viajar por todo México y parte de los EEUU, esa fue mi primera experiencia laboral.

Y hablando de la 2da, la artística, siempre fui un tipo creativo, escribí música en todo proyecto que participe, pero podemos decir que mi carrera nació cuando grabé mi 1er disco en el 99´, en el que empecé a bocetar algunas de las ideas que forman mi alter - ego, por aquel entonces tocaba con Diego Alejandro, Ariel Naon, Juan Manuel Alfaro, Pablo Ledesma, Diego Mark, Bernardo Monk, Hernán Hecht, Nicolás Santella, Mono Hurtado. Siempre me sentí seducido por el viejo continente y cuando salió una gira por Europa con el grupo de tango Don Baires, vi la oportunidad de quedarme para conocer el continente.

IDJ ¿Porqué regresaste al País? Todos o casi, no zafamos de ese imaginario argento de que por aquellos paisajes no hay que remarla tanto como acá.

MN. A decir verdad, ahí podemos saber lo que es el trabajo de músico, a ver, no es que aquí no lo podamos ver, pero allá toda presentación artística tiene un valor, es decir cada bar, teatro o espacio, tiene pautado cual será el pago por músico es decir, un cache fijo que oscila entre los 60/150  en bares o espacios pequeños y luego la que puedas pautar en los grandes espacios, sabes que cuando salís con tu guitarra es porque vas a recibir tu paga, algo que aquí es más raro. El tema que en los últimos años los espacios donde antes podías expresarte con libertad artísticamente, debido a la “crisis” se ve bastante limitado, el clásico…..por que no venís con una cantante….jeje ni hablar de los famosos recortes en cultura.
Con respecto a mi regreso, hay cosas que cumple ciclos a nivel familiar y profesional.

IDJ. ¿Cuánto te enriqueció como músico y ser humano vivir en España? ¿Qué sigue latente de esa experiencia?

MN. El hecho de conocer otras cultura, otras realidades, siempre nos enriquece, en todos los aspectos, te abre  la cabeza a nivel personal y artísticamente, de alguna manera en mi caso siempre estuve mirando para acá, mi experimentación con el tango y el folclore tiene que ver con la búsqueda de nuestra identidad que a la distancia después de más de una década empieza a desdibujarse si no trabajas en eso, personalmente  estuvo siempre presente, muchas veces incomprendido a nivel musical, teniendo que educar al músico local. Las vivencias las llevas siempre con vos.

IDJ. ¿Cómo analizas la música hoy como músico y oyente?. Hay un bosque infinito de producciones incluso en nuestro ámbito y creo, poco tiempo para escucharla sumando el hecho de poder descargarse gratis, casi cualquier cosa que uno quiera. ¿Eso es bueno, es malo, es lo que es?

MN. Yo creo que es genial, el tema es no perderse en el océano de posibilidades y mantener ese ritual de escuchar música como lo hacíamos cuando nos comprábamos el CD, eso de  romper delicadamente el envoltorio y estudiarnos  el arte de tapa mientras escuchábamos la música. Todos los nuevos soportes nos acercan la música de manera casi inmediata, eso esta buenísimo si sabes lo que querés.

IDJ. ¿Qué artistas no necesariamente guitarristas te mostraron un camino a seguir y que músicas disfrutas cuando dejas descasar la guitarra? ¿Con quiénes te ves reflejado musicalmente?

MN. Mahler, Stravinsky, Bartók, Shostakóvich, Ginastera……….. uff podría seguir y seguir. Soy un amante de la música contemporánea y ese universo me rompió el molde y me descontracturo,  al igual que el tango y el folclore. Recuerdo una clase en la casa de Pino Marrone yo estaba súper metido con el lenguaje jazzístico a full, entro a la casa, conecto mi viola y Pino entra, me pone un disco y se va, sonaba The Firebird de Stravinsky me estremeció aquella sonoridad, cuando termino, entró y me dijo …..deberías escuchar otras cosas, acá está lleno de frases para improvisar….uff aquello me mató.

IDJ. Sin llegar a ser Jazz en el sentido estricto de la palabra, “Fiebre Mallorquina”, suena pristino, cálido, prolijo. ¿Era el objetivo conseguir que sonora de esa forma? ¿Cuanto influyó haberlo grabado en el Viejo Continente?

MN. El jazz hoy en día es mucho más que swing o bop o lo que sea, el género se transformó en algo mucho más abarcativo, la improvisación es el conector y creo que gracias a esa mixtura de raíces y ritmos sigue tan vivo y en constante movimiento.
En mi búsqueda de sonoridades, recurrí a músicos que no pertenecían al jazz especialmente y que pudieran improvisar sin tener que recurrir a los clichés. 


IDJ. ¿Por qué “Danza de la Moza Donosa”?

MN. La Danza al igual que La Bagatella de Bartók son un homenaje a aquellos compositores que admiro y que me representan en su sonoridad y quise ponerlos en el repertorio de lo que era el Palma ensamble (grupo con el que fue grabado el Álbum) con el que también solíamos tocar adaptaciones de Piazzola o Cuchi Leguizamón.

IDJ. Hay una escena que ha crecido mucho de un tiempo a esta parte en el País. ¿Estabas al tanto del Jazz local estando en España? 

MN. Por suerte sí, pero una cosa es venir de vacaciones y mirarlo con ojos de turista y otra muy distinta es vivenciarlo, es muy grato ver la cantidad de proyectos y músicos que hay, ese fue un detonante en mi regreso, en esta última década a la distancia pensé que me estaba perdiendo de algo importante.

IDJ. ¿Qué viene después de este trabajo? ¿A que aspiras?

La “Suite del inmigrante” se llama el nuevo material que se viene, que sonara el día 2 de mayo junto a la presentación oficial de Fiebre mallorquina Oliverio Girondo - Vera 574, CABA a las 21hs con mi cuarteto integrado por

Juan Manuel Alfaro - Saxo tenor y flauta

Martin López Grande - Batería

Gerardo De MonacoContrabajo

Y un servidor en Guitarras, arreglos y composición.

La idea será entrar a estudio en octubre/noviembre para registrar la Suite y otras piezas.


Discografía Referencial

Fiebre mallorquina
Martin Negro Trio
Don Baires


© Impronta de Jazz

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