sábado, 26 de julio de 2008

Estan o no Estan???


Y claro que estaban ( el título léase como una alegoría al lunfardo que se utiliza en Córdoba Capital ) y que en momentos de distensión utilizábamos para definir los nombres de discos o personajes del genero y así desacartonarnos de, si se quiere, esa seriedad media implícita en el jazz en este caso haciendo referencia al magnifico tenor Stan Getz.
Amén de anécdotas personales hoy vamos a hablar de swing y cool jazz en el programa y este trabajo me parece ideal. Va a ir arropado de otros; pero los músicos en cuestión ameritan la escucha. Getz es uno de los músicos después de Metheny y Peterson por nombrar dos íconos de mi adolescencia que mas he escuchado y de quien mas discos tengo. La seducción del sonido Getz entro en mis oídos por el lado de la Bossa ( género musical que le rebajaba un cambio de marcha al samba popular del Brasil y lo mezclaba con lo mas fino del Jazz ) y del cual el Tenor en cuestión fue el responsable mayor. Su influencia como puente cultural entre los Brasileros y la línea personal de su música fue única y su dispersión por el mundo aún perdura.
Pero en este trabajo de tres compactos que recogen toda la sesión al completo en Estocolmo hay tan solo una referencia a su agitado y perdurable paso por la música del país con el carnaval mas vistoso y alegre, se trata del corte nro 7 del CD I - "O grande amor". El resto de la sesión es jazz de lo mejor. Y que decir del acompañante ? Un Chet Baker muy mal en su aspecto personal desdentado y con un desgaste por una vida marcada por sus adicciones; cuestión que en Getz ( que también paso por lo mismo ) no era tan evidente y supo preponderar por sobretodo su carrera como músico y creador de atmósferas de ensueño. Dos personalidades difíciles que según cuenta la historia nunca se llevaron bien, es mas sus encuentros anteriores eran testigos mudos de esto que les comento y parece ser que Stan no soportaba que las intervenciones de Baker eran mas festejadas por el aplauso del público. En fin cuestiones del Ego. Cuesta creer en muchos casos que tipos con adicciones tan duras llegaran a grabar obras magníficas llenas de tensión y belleza. Ambos fueron parte de lo que se conoció como el movimiento de la costa Oeste, pata del jazz que comenzó cuando las Big Bands perdían popularidad, pero eso es parte de otra historia. Este sábado la puerta de entrada esta abierta en Impronta de Jazz

No hay comentarios: