viernes, 27 de septiembre de 2013

CÉLINE BONACINA





Céline Bonacina : Baritone Sax. From Bach to Be-Bop, Classical to Jazz, Trio, Live in Germany, 2011

miércoles, 18 de septiembre de 2013

RESONANCIA SINIESTRA - EL OYENTE COMO MÉDIUM



Sobre la escucha siempre ha pesado un estigma: el de ser, de entre todos nuestros sentidos, el menos fiable. Mientras que aquello que vemos y tocamos se nos revela como una realidad “objetiva”, una certeza a partir de la cual establecemos nuestro lugar en el mundo, el sonido se parece más a un fantasma; su lugar en el espacio es ambiguo y su existencia en el tiempo, transitoria. Es por ello que el sonido ha actuado desde siempre como metáfora de la revelación mística, los deseos prohibidos, lo siniestro, lo informe, lo sobrenatural y lo desconocido. 

Así como en Modos de ver John Berger establece el lugar preponderante de la mirada en nuestra experiencia del mundo, en Resonancia siniestra David Toop se propone reflexionar acerca de la naturaleza del sonido y de la escucha, asumiendo como punto de partida su carácter espectral e inaprensible. A partir de estas reflexiones –organizadas de manera musical, con ideas que vuelven una y otra vez como notas recurrentes–, Toop da los primeros pasos para trazar una historia de la escucha, basándose en el testimonio que de ella nos brindan los mitos, la literatura, la pintura y la escultura. Esos medios, que pese a ser silenciosos poseen la capacidad para representar el sonido y el acto de la escucha, funcionan como dispositivos de grabación anteriores al invento del fonógrafo, permitiéndonos imaginar cómo era la vida auditiva en otras épocas y revelándonos cuál es la verdadera esencia del sonido, el ruido y el silencio. Así, al descubrir un mundo sonoro al interior de la obra de escritores como Melville, Hoffmann, Poe, Joyce, Woolf, Faulkner o Beckett, y de artistas como Rembrandt, Vermeer, Duchamp, Rauschenberg, Munch, Malévich o Twombly, Resonancia siniestra nos abre las puertas de una nueva dimensión perceptiva.

David Toop (Londres, 1949) es músico, escritor, curador y artista sonoro. Fue miembro de The Flying Lizards y cofundador de The London Musicians' Collective, un colectivo de improvisación musical que contribuyó, a partir de los años setenta, a la constitución de la escena experimental inglesa. Pese a ser, con más de una veintena de discos en su haber –el primero de ellos publicado en el mítico sello de Brian Eno, Obscure–, uno de los más destacados exponentes de la música ambient experimental, se lo conoce mayormente por su labor como crítico e historiador musical. Además de haber sido editor adjunto y columnista de revistas como The Wire y The Face, Toop es autor de varios libros considerados fundamentales, entre ellos, Rap attack (1984), Ocean of sound (1995) y Haunted weather (2004).

Un libro que no debe faltar en ninguna biblioteca seria. Muy recomendable.

 

miércoles, 11 de septiembre de 2013

SE VA LA SEGUNDA



Ha visto la luz la nueva entrega del emprendimiento chileno “Papeles De Jazz”, en su formato digital con un balance positivo que aporta su contribución al mejor conocimiento de la música en aquel País.

La consigna sigue siendo información de actualidad sobre las distintas vertientes y propuestas del jazz en un contexto amplio que abarca desde lo actual tanto a nivel local como internacional, cuyo objetivo es captar al aficionado entendido o  principiantes curiosos  y hacerlo partícipe de un producto de calidad  con una plataforma multimedia colorida, amena e instructiva.

Una de las notas más interesantes de este número es  : "Discografía del Jazz en Chile I - Un panorama inicial"; por el musicólogo Álvaro Menanteau que nos da una idea del desarrollo discográfico que tuvo el género en el País andino; un buen punto de partida para darse una idea del contexto histórico en que se desarrollo este lenguaje con su variantes en aquel lugar.    

Hay razones más que suficientes para que se acerquen y le echen el ojo a esta digna publicación. Celebramos desde aquí su retorno y que haya una fructífera continuidad.



R:IDJ

lunes, 2 de septiembre de 2013

ENTREVISTA - ROBERTO DOMÍNGUEZ



El español Roberto Domínguez es fotógrafo de jazz amateur y en su andar por los caminos del  mundo va plasmando testimonios visuales de los músicos involucrados en este arte del cual la fotografía es un anexo inevitable. ¿Cuántas veces no habremos comparado un disco por la foto de portada? 
Desde el rostro  pensativo de Lou Donaldson a la concentración de Ken Vandermark o las manos de Mats Gustafsson cada imagen capturada en un determinado momento de tiempo y espacio son reflejo vívido de un instante inmovilizado que narra sus impresiones y nos lleva a pensar en los meandros que se activan sobre la creatividad, la técnica y la fuerza expresiva de la fotografía.

IDJ. ¿Cuál crees que es, de haber, el secreto de una buena instantánea?

Uy, comenzamos bien, con una pregunta sin respuesta. No lo sé, de verdad que no lo sé. Y lo peor es que ya no sé por qué criterio regirme para saberlo, así que al final opto por buscar las imágenes que a mi me gustan. 
Está claro que hay un componente técnico y de composición que supone un alto porcentaje del peso visual de una fotografía, pero luego tenemos un componente emocional difícil de medir y evaluar.

Además estamos en una sociedad donde se consume y deglute mucho de todo, especialmente en el campo de la imagen; en un día se hacen más fotografías que en años de fotografía analógica, y el 99,9% de esas fotos son de usar y tirar; se hace la foto con cualquier dispositivo, se le aplica un filtro resultón que nos haga parecer genios, se cuelga en internet, se consume, se "likea" y se olvida. Falta mucha cultura visual y hay una carencia de "visualizantes" de imágenes con conocimientos.
 
Si a esto le sumas que se vive un culto al ego fotográfico, el propio y el ajeno, tienes un caldo de cultivo perfecto para que se sobrevaloren imágenes tremendamente planas pero con un photoshop encima que te mueres, y se infravaloren imágenes con un trabajo descomunal de composición, manejo de la luz, técnica, etc.
Al final, como en mi caso la fotografía no es mi medio de vida y sí mi manera de expresarme ante el mundo, tiras de imaginario, de memoria visual, de cultura gráfica, de cierto respeto por las leyes de la fotografía y creas tu propio universo visual con la esperanza de que al menos a alguien le agrade.

IDJ. ¿Quiénes fueron tus maestros? 

Tengo que hablar de 4 tipos de maestros. Los primeros, los más reales, digámoslo así, son los que me enseñaron fotografía como tal. En mi caso se trata de la escuela Man Ray, de Madrid, con Emilio y Carlos al frente; con ellos aprendí los fundamentos de la fotografía. 

Después tenemos a todos los grandes fotógrafos de la historia: W. Claxton, Eugene W. Smith, H. Leonard, R. Mapplethorpe, C. Bresson, R. Doisneau,…. por citar sólo algunos. Un tercer grupo lo tenemos en los fotógrafos actuales, aún con vida; también, por poner un par de ejemplos, podemos hablar de C. G. Rodero, J. Natchwey, Pep Bonet,…la lista es interminable!.

Y por último, un cuarto grupo lo tengo en mis compañeros de escenarios, de los que aprendo día a día, tanto con sus imágenes como por su forma de trabajar. Además día a día sigo un buen puñado de blogs de fotografía y fotógrafos, por lo que siempre surgen nuevos maestros. 

IDJ. Gran parte de tus imágenes no tienen muchos retoques por lo que he visto, lucen al natural. Aún así, en los tiempos que corren es inevitable no utilizar algún software que retoque lo que uno quiso contar y completar mejor el cuadro. De utilizarlos ¿Cuáles recomiendas? 

Si trabajas en digital y quieres hacer un trabajo de cierta calidad has de disparar en formato ".raw", que es el equivalente al negativo analógico, lo que te obliga a usar algún tipo de programa. Como mi formación es más bien clásica, y los fotógrafos que me inspiran y me han inspirado trabajan así, y, qué demonios, porque es la fotografía que me gusta, yo sólo uso el Lightroom, que es un programa de revelado digamos clásico, salvando las diferencias, que no te permite hacer los procesados de otros programas. Con este programa, una buena cámara, mejores lentes y una buena base técnica, sazonado con tu propio arte, hoy por hoy no me hace falta más.

IDJ. ¿Que diferencias ves entre la generación de cámaras a rollo  y  las actuales? Siempre existe el mito, como con el vinilo en contraposición con el cede, que lo viejo al ser más artesanal era mejor o más poético por poner otro término. 

A esta pregunta no te puedo responder. Si bien mi formación en Man Ray fue con analógica, enseguida me pasé al mundo digital, y todos mis trabajos han sido con digital.

IDJ. ¿Qué parámetros representan algo verdaderamente importante para tu concepción estética?

Es algo que evoluciona constantemente, permanentemente se halla en proceso de evolución. Hace tiempo Esther Cidoncha (una excelente fotógrafa del género y mejor persona) decía en una entrevista que ella acostumbraba a tomarse un tiempo antes de comenzar a hacer fotos, para poder ver cómo se movía el escenario (los músicos, las luces, etc). 

Hice mío ese concepto y lo extendí, y ahora espero que sea la cámara y mi ojo fotográfico los que se pongan de acuerdo, los que se alineen con lo que suena; intento que mis imágenes capten el sonido, que suenen.
Incluso durante un concierto voy modificando el enfoque que le doy según evoluciona éste, escucho qué me pide la música, con qué imágenes se sentiría mejor. 

Y luego, cuando llega el momento del revelado, le doy otra vuelta de tuerca; imágenes que pensaba que funcionaban bien de una manera veo que funcionan mejor con algún revelado especial. 

No hay dos conciertos iguales, y por tanto creo que no debe haber una manera uniforme de hacer las fotos. Tú mismo ponías el ejemplo en la introducción: no es lo mismo fotografiar al octogenario Lou Donaldson que al enérgico y free Matts Gustafsson. 

IDJ. Susan Sontag en sus ensayos sobre este arte daba cuenta de la carga social e ideológica que trae consigo. ¿Cómo te llevas con esa cuestión? 

Bueno, si te dedicas a fotografía de conciertos de jazz es un tema que apenas te planteas, porque no te enfrentas a planteamientos sociales ni ideológicos; es "sólo" música, aunque evidentemente en tu forma de contarlo sí que hay elementos personales y artísticos. 

Ni tan siquiera en mi otro proyecto permanente, mi blog fotografovivo, de fotografía más personal y sin temática definida, abordo problemas de esta índole, salvo excepciones.  
Pero como te decía antes, aunque el fotógrafo no quiera, muchas veces la carga se la pone el propio observador.

IDJ. En el libro “Retratos En El Tiempo” (1)  se dice que hay dos clases de artistas del retrato: Los que crean máscaras y los que añaden alma a las imágenes. ¿En cuál de estos dos conceptos te enmarcarías o te ves identificado en ambos? 

Si te soy sincero, nunca me había considerado un retratista, siendo un género que he rehuido (de hecho no me gusta que la gente pose para mi, soy incapaz de hacer buenas fotos con posados).  Y sin embargo, en cierto modo, soy un retratista jajajajajaja.

Quiero pensar que mis imágenes se quedan impregnadas de un poquito del alma del músico. Como te decía antes, intento que mis imágenes suenen y, por extensión, que mis retratos respiren, murmuren, giman, hablen, mediten….

A veces espero mucho tiempo hasta tener esa cara que quiero, esa cara que refleja el estado anímico de la música, de lo que fluye entre el músico y sus compañeros, entre éstos y el público. 

IDJ. ¿Qué casas discográficas han reflejado mejor lo que el jazz representa en esa comunión entre imagen, música y objeto? Me interesaría tu mirada sobre sellos como ECM, HatOlogy o Winter & Winter que renovaron la percepción del arte de tapa.

Sin duda alguna la reina indiscutible y aún no destronada es Blue Note en la época del diseñador Reid Miles, que convertía cada cover en una obra de arte, unida indisolublemente al artista.
Sus portadas siguen siendo la fusión perfecta entre la música, el músico, la discográfica y el diseñador, y se han convertido en hitos que todos tenemos en nuestras mentes, que han traspasado fronteras. 

De los tres sellos que me citas me quedo con ECM, uno de mis preferidos en todos los sentidos, tanto en el que hablamos ahora del diseño de portadas, como de la absoluta innovación musical que persigue Manfred Eicher, con la que me identifico; para mi hablar de ECM supone hablar de la música sin etiquetas, sin clasificaciones, sin géneros, de la música por el placer de la música.

Winter & Winter me sorprende poco en lo relativo al diseño de portadas, creo que no innova al nivel de ECM. Respecto a HatHutRecords y su sección jazzista hatOLOGY me parece muy inteligente el uso que hace de la fotografía como elemento de portada; me fascina, al igual que los desenfocados de ECM, elementos que atraen poderosamente mi mirada de fotógrafo y de apasionado del jazz. 

IDJ. No deja de ser una situación llamativa algo que yo llamo “benditos errores” que resultan en fotos corridas como en movimiento, con contornos desdibujados y que repiten la misma imagen sin que la intención original haya sido esa y terminan siendo fantásticas desde lo estético, me pasó en el último concierto de Brad Mehldau un músico melindroso a la hora de ser captado por la cámara. ¿Qué mirada tienes sobre eso? 

Bueno, en mi caso ha sido algo diferente el proceso. Digamos que mi me enseñaron a que es el fotógrafo el que tiene que dominar la técnica para ser el que decida cómo ha de ser la foto, y por tanto intento minimizar al máximo esos errores.

Lo que me pasa es que, como muchos, estuve trabajando durante bastante tiempo con una cámara y una óptica insuficientes para la fotografía de conciertos, sobre todo cuando las condiciones lumínicas son malas. Es entonces cuando tiras de técnica y creas imágenes abstractas (desenfocados, fotos movidas, efectos túneles…) que luego se incorporan a tu propio estilo, que continúas incluso cuando tienes un equipo mucho mejor.
 
Son esas imágenes que no sabes si gustan o no, pero que forman parte de tu universo visual y artístico.
 
IDJ. Como aficionado que deduzco debes ser al jazz, que es lo que escuchas cuando la cámara se apaga?

Uy! Estoy todo el día enganchado, hasta el punto de ser un poco asocial jajajaja. Entre los múltiples podcasts que me descargo de diferentes programas, discos que me pasan para reseñar, conciertos online de diferentes canales especializados…lo cierto es que nunca paro, siempre tengo algo, siempre descubriendo cosas nuevas. 

IDJ. ¿Algún músico que últimamente te haya sacudido como oyente?

Pues unos cuantos. Por citar algunos….Orrin Evans, Eleni Karaindrou, Cécile McLorin, Ulf Adaker, Elina Duni, Tin Hat, The Cutting Edge, la Piccola Orchestra Gagarin, cualquier cosa de Marco Mezquida, Jeremy Pelt, cualquier proyecto que emane de la mente del productor Javier Limón, Craig Taborn, Clarence Penn, David Chiesa, Jaimeo Brown, Mathieu Werchowski...

IDJ. ¿Cuál es la diferencia entre fotografiar el jazz y otras música? 

Pues no lo sé porque las otras músicas apenas las fotografío. Creo que es vital que te guste la música que fotografíes, que la ames con profundidad; sólo así puedes hacer que emane el alma de la música en cada imagen.  Las otras músicas las escucho, solamente, algo que creo que también es muy importante que hagamos los fotógrafos de tanto en tanto. Dejar la cámara guardada y limitarnos a sólo escuchar, observar al público, observar a los fotógrafos que estén por allá; es una manera excelente de tomar notas mentales para futuras fotos! 

IDJ. Por último, si tuvieses que seleccionar una foto tuya como la más lograda ¿Cuál sería?

Pregunta trampa! Paso palabra jajajajajaa.



(1) Retratos En EL Tiempo - Carlos Fuentes / Carlos Fuentes Lemus; página 13. Alfaguara

R: IDJ