sábado, 28 de noviembre de 2015

RODRIGO DOMINGUEZ - LIMóN


El saxofonista, clarinetista y compositor Rodrigo Domínguez, se va consolidando como uno de los ejecutantes de la gran familia de la lengüeta, más fructíferos de este tiempo. Ha creado un cuerpo de trabajo comprometido con su música madura, que se explaya a sus anchas en este nuevo camino. Sus anteriores muestras “Presencia” “Tonal” y “Soy Sauce”, este último, dedicado a nuestro sempiterno Spinetta; ya presagiaban la solvencia de un artista con gran personalidad musical.

Registrado para el sello Kuaimusic, Rodrigo llega a un nuevo pico creativo con su cuarteto, que funciona como un espejo cromático reflejando el muy buen momento del jazz por estas tierras.

A partir del primer corte, la combinación entre ellos, profundiza la búsqueda de un sonido, compuesto por el intercambio de fondos melódicos con un plafón en el que circula el potencial creativo del líder.

El ingrediente más destacado es la columna vertebral que atraviesa los 9 cortes:  Bill ( Evans); dividida en dos partes: una más corta, otra más extensa donde se invierte corazón y alma para llevar  una reflexión que rinde homenaje a su fuente estilística. Suena tan natural como jugo recién exprimido.

El repertorio se mueve a través de diferentes obstáculos que plantea Domínguez desde la escritura, todas las composiciones son de cuño propio, sin perder la cabeza en estructuras muy complicadas.

Cada corte logra transmitir encanto y luz, pigmentado con toques bien ingeniosos, con vía directa al interior de la entraña de su saxo; en busca de sonidos más puros, sin cruzar la frontera  hacia los extremos del salto al vacío.

Los acompañantes aportan una gama de expresión creando una matriz de estados de ánimo cambiantes y son poseedores de una autoridad inobjetable; están entre lo más destacado del argot local.

En conclusión nos topamos con una presentación de diferentes diapositivas musicales en movimiento, que convergen en una pintura muy actual vinculada a los estilos contemporáneos; pero ante todo es jazz y del mejor. Placer auditivo asegurado.

Rodrigo Domínguez : Saxo Tenor
Ernesto Jodos : Piano
Jerónimo Carmona : Contrabajo
Carto Brandán : Batería

domingo, 15 de noviembre de 2015

GABRIEL HERNÁN PALATCHI – TRIVOLUTION



Músico Argentino radicado en Tulum, México y que tiene a Canadá como centro de operaciones para presentaciones en festivales de jazz, nos hizo llegar digitalmente a oídos de quien escribe, su tercera producción para difusión y/o reseña. Su anterior registro “Caja Musical” también paso por el dial.

En esta nueva vuelta de página Palatchi suma y sigue para marcar de nuevo la cancha  y jugar con los matices más sutiles de su latinidad. Acompañado por un trío  y con invitados en distintos parajes del camino, el pianista busca difundir “lo nuestro”; más allá de los límites geográficos y culturales que lo separaron de nuestro País cuando se fue en búsqueda nuevos horizontes.

De a poco su nombre y su propuesta se ha ido solidificado entre los referente más encumbrados de la música latina for export. Ya sea por la vitalidad de su jovial discurso, ( es un trío pero suenan como si fuesen varios más ) que viene a aportar un espíritu renovado en el ajetreado camino de este tipo de formas del género, dejando una semilla para las generaciones futuras.

El tema de apertura le hace honor al nombre, “Dinamita”. Es difícil escuchar esta canción y no imaginar a los músicos disfrutando a pleno del entete entre ellos, exhibiendo una gran sonrisa mientras tocan al palo; les aseguro no van a dejar de marcar el ritmo con los pies.

El resto del repertorio, es ecléctico, de muy buena hechura y deambula dentro de parámetros que van desde lo sudamericano, medio Oriente, tango argentino, funk y otros estilos vibrantes e intensos; que van más allá del influjo tórrido que atraviesa las trece composiones, estableciendo el tono para una experiencia de escucha edificante y, literalmente, en movimiento. Lo secundan el baterista mexicano José María 'Chema' González y el bajista canadiense Kerry Galloway, quienes cumplen muy bien su rol como nuevos abanderados de la música latina contemporánea.

Se termina el cedé a pura alegría con “Vive” un gesto sin más a Celia Cruz y uno se queda satisfecho, pero con ganas de más. Un trabajo hecho con dedicación y auténtico sentido de pertenencia hacia sus raíces. Disfrutable y pegadizo de principio a fin, porque la vida hermano latino es pa’ gozal!!!!!!!!


Gabriel Palatchi - (Argentina) : Steinway Piano, Nord Electro + Sintetizadores 
Jose Maria “Chema” Gonzalez (Mexico) - Batería y Percusión 
Kerry Galloway - (Canada)  Bajo Eléctrico

miércoles, 11 de noviembre de 2015

MAT MANERI + TANYA KALMANOVITCH - LA MONTAÑA MÁGICA



Los excepcionales violistas Tanya Kalmanovitch y Mat Maneri, entre otros méritos artísticos, han sido pioneros en el desarrollo de las técnicas, conceptos e ideas que llevaron a que su instrumento ocupe un lugar de privilegio en el territorio de la improvisación musical contemporánea.

Tanya Kalmanovitch es una violista, violinista, escritora y etnomusicóloga nacida en Canadá cuyo trayecto musical aparece atravesado por la música clásica, el jazz y la música improvisada experimental. En su obra se dan cita el trío que conforma con el pianista Anthony Coleman y el acordeonista Ted Reichman, sendos dúos con la pianista Myra Melford (materializado en el álbum Heart Mountain de 2007) y el violista Mat Maneri y también congrega un amplio rango de trabajos junto a músicos de jazz como Mark Turner, Benoit Delbecq, Mark Helias, Chris Speed, Tom Rainey, Dan Weiss, etc.


La primera vez que tocamos juntos, hace una década, sabíamos que algo especial estaba en el aire. Parte de ello es nuestra historia con el instrumento. Ambos tocamos la viola, el héroe desconocido del mundo de las cuerdas, y cada uno de nosotros se trazó su propio camino como improvisadores en un momento en el que tocar jazz con este instrumento era todavía un oxímoron.

Pero en realidad, es porque compartimos las mismas creencias básicas respecto de la música. Para cada uno de nosotros, la improvisación no es acerca de “dejar ir”, sino que se trata de “profundizar en”. Es una disciplina; un espacio ritual que nos une al momento y tenemos que estar presente para cada posibilidad. Cuando tocamos, escuchamos con algo más que nuestros oídos: percibimos con todas las partes de nuestra experiencia.

Tocamos fuera de la creencia de que cada uno de nosotros tiene una voz personal, “una melodía secreta” que interpreta la calidad de la esencia de nosotros mismos. Esa voz demuestra la tensión, la incertidumbre y la diferencia tan literal y figurativa del contrapunto. Se trata de la empatía de hacerlo audible. Y cuando podemos tocar de esta forma, creamos un espacio para que otros hagan lo mismo.




domingo, 1 de noviembre de 2015

IGNACIO CACACE - NEW CONCEPTS OF POP MUSIC


Hay dos miradas distintas muy marcadas entre el tipo de jazz que viene desde La Plata y el que proviene de Buenos Aires. Quizás, sin desmerecer, porque desde la Capital, sigue predominando el sentido estético europeo y los escenarios más clasicoides (entiéndase be-bop - hard-bop, for export ) y lo que vengo escuchando del lado platense del asunto, más jovial, mas ameno. Al menos lo que ha llegado a mis manos, suena como más impregnado de la canción popular, llevándola al terreno del jazz. Es solo una impresión.

El leitmotiv de las composiciones según argumenta su líder se basa en música escuchada a lo largo de su corta y joven vida, diversificando horizontes que atraviesan desde viajes a vivencias emocionales, volcado en este logrado primer paso, donde despliega sus virtudes compositivas.

Ignacio es parte de una unión que conecta un tipo de jazz que se renueva en jóvenes talentos. Las filiaciones de este nuevo concepto se basa en la mágica interacción entre el grupo. Desde la original invención del guitarrista, con  una génesis de estructuras armónicas y  sutiles, aupado en las consideraciones dinámicas que establece junto a sus acompañantes.

En seis episodios se las arregla para crear un envoltorio de jazz que trasciende el género y simplemente se convierte en música. Ya sea la sentida “Good Old Fashioned Love (to Pilar),” una balada cuya pulsión implícita desemboca en el reordenamiento de dos figuras armónicas entre guitarra y saxo; o los paisajes que apuntala en “Dinosaurs”, este grupo logra sumar forma y contorno, sobre composiciones bien trabajadas desde la escritura; lo que hace que la comunicación entre ellos sea de sumo agrado. La guitarra de Ignacio se funde con el telón de fondo mientras guía el tempo y la dinámica de cada canción.

Otra presencia que no está ausente, moviéndose elípticamente a través de los cortes es la del saxofonista Gianni Gagliardi que cumple un papel preponderante, gravitando en el cuerpo de las canciones y deslizándose alrededor y debajo de la línea melódica. “Archeological Reseach” suma un buen espaldarazo de bop a la antigua, ofreciendo una fuerte interacción entre saxo y guitarra de manera dura-oscilante que entusiasma en los 5:50  que dura el corte. “Lenka” con ese toque medio calipso de la batería en manos de Jesse Simpson y el contrabajo de Lars Ekman,  conforman una  sección que empuja a nuevas alturas los temas, y logra una tonicidad de ritmos que suben y bajan.

En "Recuerdos de Chechenia (to my father)", Ignacio dedica a su padre una hermosa canción teñida de morriña, reconsiderando en su solo la forma lírica con el fin de reafirmar una reflexión sentida y cargada de duende. En pocas palabras, este es un disco a tener en cuenta; cuya génesis melódica está llena de sorpresas y que vale la pena sumarlo al anaquel. Para escuchar y volver a escuchar.


Ignacio Cacace / guitarra y composición
Gianni Gagliardi / saxo tenor
Lars Ekman / contrabajo
Jesse Simpson / batería

R:IDJ