Los dialectos están vinculados a la
variedad lingüística y por ende a la diversidad de la misma, sin embargo, no
están catalogados como importantes a diferencia del lenguaje central de determinado
lugar. Se lo toma como una categoría menor o una forma particular de hablar o
como en este caso de lograr una identidad en el lenguaje musical.
La pluralidad de los dialectos de Steve Lehman no pretende ser hegemónica. Su desarrollo oscilante
e intensamente cerebral de alto vuelo se nutre de standards y composiciones
originales para poner en escena la
complejidad de su swing nervioso, que
constituye una estética personal, lo cual no es poco.
Desde las primeras notas, el pigmentado
sonido del líder arrostra continuidades y rupturas en base a melodías ondulantes.
Hay relecturas logradas: “Moment’s Notice” de Trane, “Jeannine” de Duke Pearson
(demoledora versión) o “Mr. E” de Jackie McLean, donde se evidencia su trabajo
para engendrar nuevos caminos.
La tensa cuerda que sostiene “Foster Brothers” , “Alloy” o “Pure Imagination” , dan pie a la sinergia entre Damion Reid y Matt Brewer quienes
suman una técnica impecable y un paroxismo impiadoso, dislocado; cuya retórica cruel aumenta a favor de quien
se adentra en la urdimbre del
saxofonista con base en el pasado y un lúcido guiño al futuro.
Un disco que si se lo escucha atentamente, no quedará
en la mera anécdota de la infinidad de lanzamientos que nos sobrepasan día a día,
muchos de ellos de dudosa calidad. No es este el caso.
Steve
Lehman: Saxo Alto
Matt
Brewer: Contrabajo
Damion
Reid: Batería
R:
IDJ
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