Nueva entrega del baterista perteneciente a la generación de músicos que cambiaron el sonido y lenguaje local, desde una corriente que denominaría mainstream contemporáneo; sustentado en una prédica de matices melódicos, de buen gusto y frescura.
La estructura compositiva se
desenvuelve desde un lugar delicado y sutil donde radica el ritmo pausado, que
se expresa con controlada cadencia, aún en los momentos más agitados.
Los instrumentos tejen con soltura una amalgama
de sonidos y recursos, redescubriendo paisajes en la medida justa. Aún
movidos por una actitud de búsqueda, es música viva con una lírica innegable, que no pierde los estribos.
El microcosmos de la banda que lo
acompaña como una máquina bien aceitada, todos ellos reconocidos del panorama
local; hacen que las composiciones suenen vivas, flexibles, con rica
interacción y fluidez.
El líder, como en el tercer momento de
la dialéctica, donde se concilian los opuestos, da muestras de madurez en su
pluma. El titulo, toda una declaración de intenciones, hace referencia a ese
acto político que nuestro país debería tener en los tiempos que corren y
según sus propias palabras, pretende ser un humilde homenaje a todos los que
creyeron en ideas superadoras y en el cambio social, aun perdiendo la propia
vida en esa lucha.
Juan Cruz de Urquiza: Trompeta
Natalio Sued: Saxo tenor
Rodrigo Domínguez: Saxo alto
Francisco Lo Vuolo: Piano
Sebastián de Urquiza: Contrabajo
Hernán Mandelman: Batería y Composición
No hay comentarios:
Publicar un comentario