Este Sábado, comenzaremos el primer bloque del programa recordando al gran pianista potugués Bernardo Sassetti, uno de los más prestigiosos de su País, fallecido el pasado 10 de Mayo.
martes, 22 de mayo de 2012
martes, 15 de mayo de 2012
ENTREVISTA : UMT
La música de este trío crea
atmósferas e impresiones de espesor y densidad,
lo cual no deja de ser un valor
añadido que genera renovadas escuchas para adentrarse en la propuesta de Underground
Mafia Trío.
Con un trombón con un pie en la
tradición y otro en la vanguardia, secundado por un contrabajo de sonido
robusto y nebuloso y una batería de respiración entrecortada, Underground propone algo
diferente al panorama actual, potenciando una puesta en escena temperamental e insidiosa que se cuela en
nuestros oídos y que buscará nuevos adeptos prestos a encontrar nuevas
sensaciones sonoras.
Postbop moderno, subterráneo si
tuviese que definirlo, aunque lo más recomendable sería escucharlos sin caer en
el tedio de las odiosas comparaciones.
IDJ. ¿Qué hacían antes de juntarse y
darle forma a UMT?
UMT. Estábamos cada uno en diferentes
proyectos relacionados al jazz y a la improvisación.
IDJ. ¿De donde surge la idea de armar
un trío con trombón?
UMT. Del trombonista… (risas) . No...en realidad
surge de la necesidad de juntarse a improvisar y explorar esa sonoridad.
IDJ. Un día de trabajo en la sala de
ensayo. ¿Utilizan algún tipo de rutina para componer? ¿Es un planteo
democrático y abierto la aportación de ideas? ¿Que elementos suelen ser los que
surgen primero?
UMT. No hay una rutina, pero sí un ritmo
de trabajo. El planteo es democrático y los elementos a trabajar son
composiciones que cada uno aporta.
IDJ. Desde mi escucha, el trombón es
quien lleva el núcleo melódico mayormente. ¿Es este el instrumento ideal para el tipo de jazz al que quieren llegar?
UMT. Creemos
que si. Investigamos las posibilidades melódicas del contrabajo y las del
trombón y cada tema adquiere la personalidad que lo caracteriza.
IDJ. Como cordobés que soy (y
disculpen la autorreferencia) me emocionó la dedicatoria (que a mi modo de ver
es conocido por una gran minoría de aficionados) al cornestista Enrique Norris.
¿Que fue lo que motivo tal composición?
UMT. La dedicatoria tiene que ver con que
Enrique fue y es parte importante en nuestra formación musical y nosotros tres
(como gran parte de nuestros colegas) le tenemos mucho respeto y cariño.
IDJ. ….Y el resto del material
temático ¿En que se inspiraron?
UMT. Hay
temas que se originan mediante improvisaciones o que no tienen otro motor que
no sea musical y otros que tuvieron su envión inicial en poemas de Alejandra
Pizarnik (Alejandra) o Roberto Juarroz (Como un patio vacío) y en la obra de
Oesterheld y Breccia, Mort Cinder.
IDJ.
Cada uno de ustedes debe tener ideas disímiles alrededor de sus influencias.
¿Podrían nombrar, cada uno en su instrumento, cuales son sus referentes?
UMT. Podríamos
resumir en:
HR: Ed Blackwell, Paul
Motian.
IV:
Charlie Haden, Charlie Mingus.
FS: George Lewis, Albert
Mangelsdorff.
Pero
también tenemos en común grupos como los cuartetos de Ornette Coleman, el trío
de Barry Altschul junto a Ray Anderson y Mark Elías y el trío BassDrumBone.
IDJ.
Entre lo escrito y lo improvisado, ¿Existe algún tipo de límite? ¿Cabe la
posibilidad de que la improvisación borre en parte el esquema original que
traían y se transforme en otra cosa? ¿Les sucedió esto último durante la
gestación de los temas?
UMT. Las
posibilidades son siempre muchas, eso es lo interesante de jugar a esto, pero
si se exploran improvisaciones que parten de música escrita, la idea es
respetar el espíritu original que propone el compositor. Si después se proponen
puntos de partida diferentes porque la melodía se encara desde otro lugar, las
improvisaciones seguramente tendrán otro enfoque.
IDJ.
Cada vez que uno piensa en algo ya hecho, surge siempre algo distinto ¿Hubiesen
modificado alguna situación de esta primer muestra de su trabajo? ¿O están
conformes con el resultado obtenido artísticamente?
UMT. No
creo que hubiéramos modificado nada, era lo que queríamos tocar en ese momento
y eso hicimos. Por suerte no fue un punto final si no una instancia más en el
desarrollo del trío.
En
esta música las grabaciones son (como escribe Antonio Muñoz Molina en El
Invierno en Lisboa) presente salvado. Si bien también es el resultado del
trabajo anterior de ensayos y conciertos, en definitiva no es más que lo que
cada uno quiso tocar ese día.
IDJ.
¿Que es lo que más les atrajo de tocar
una música como el jazz y no otra?
UMT. La
posibilidad de expresión, de improvisar con otros, lo antiestático, el ritmo y
la sorpresa.
Francisco Salgado: Trombón
Iván Viaggio: Contrabajo
Hernán Rodríguez: Batería
http://www.undergroundmafiatrio.blogspot.com.ar
© Impronta de Jazz
lunes, 7 de mayo de 2012
PAULIEN VAN SCHAIK - IN SUMMER
En este primer encuentro por mi parte, de su segundo registro de 2003 con la joven cantante Paulien Van Schaik debo decir que me sorprendió gratamente.
La holandesa toma el riesgo de enfrentarse a la prueba decisiva de dar su versión de los grandes standards y el resultado es halagador.
Con un contorno y con un entorno sucinto que le permiten compenetrarse y adentrarse en el cuerpo de las canciones el clima en general del disco se mueve entre la introspección bucólica y la sensualidad melancólica. Voz clara, casi aniñada, desnuda en muchos pasajes, en rigor de lo laxo del acompañamiento y el beneficio de una dicción precisa, cada interpretación nos genera una sensación sutil como absorber la calidez de los vientos helados.
Tanto el contrabajista Hein Van De Geyn como el trompetista belga Bert Joris (aquí invitado al convite) hacen fácil el camino, para recrear el espíritu de este repertorio tenido por indiscutido.
Es el tipo de trabajo para escuchar en buena compañía un día de lluvia, y dejarse llevar por la situación.
Paulien Van Schaik – Voz
Hein Van De Geyn - Contrabajo
Bert Joris – Trompeta
R:IDJ
La holandesa toma el riesgo de enfrentarse a la prueba decisiva de dar su versión de los grandes standards y el resultado es halagador.
Con un contorno y con un entorno sucinto que le permiten compenetrarse y adentrarse en el cuerpo de las canciones el clima en general del disco se mueve entre la introspección bucólica y la sensualidad melancólica. Voz clara, casi aniñada, desnuda en muchos pasajes, en rigor de lo laxo del acompañamiento y el beneficio de una dicción precisa, cada interpretación nos genera una sensación sutil como absorber la calidez de los vientos helados.
Tanto el contrabajista Hein Van De Geyn como el trompetista belga Bert Joris (aquí invitado al convite) hacen fácil el camino, para recrear el espíritu de este repertorio tenido por indiscutido.
Es el tipo de trabajo para escuchar en buena compañía un día de lluvia, y dejarse llevar por la situación.
Paulien Van Schaik – Voz
Hein Van De Geyn - Contrabajo
Bert Joris – Trompeta
R:IDJ
viernes, 20 de abril de 2012
BRAD MEHLDAU TRIO : ODE
Nuevo trabajo de uno de los pianistas pioneros que más hizo desde los 90 en adelante para renovar la estética del trío en jazz.
Con once composiciones propias, lo cual lo emparenta con su trabajo “The House On The Hill” solo en el hecho de que las mismas son de puño y tecla del líder, Brad nos vuelve a sorprender gratamente con buenas melodías cargadas de mucho talento y una sustancialidad abrumadora que parece no agotársele, la colectiviza y hace extensiva a sus acompañantes, Larry Grenadier en el contrabajo y Jeff Ballard en la batería.
Los temas están dedicados según palabras del propio pianista a la familia, amigos, compañeros, e incluso una de sus favoritas “Aquaman” en referencia a su superhéroe favorito.
Jazz muy bueno que nos interpela desde la primera nota, moderno, contemporáneo, que lo distingue como un referente dentro de esta música.
Con once composiciones propias, lo cual lo emparenta con su trabajo “The House On The Hill” solo en el hecho de que las mismas son de puño y tecla del líder, Brad nos vuelve a sorprender gratamente con buenas melodías cargadas de mucho talento y una sustancialidad abrumadora que parece no agotársele, la colectiviza y hace extensiva a sus acompañantes, Larry Grenadier en el contrabajo y Jeff Ballard en la batería.
Los temas están dedicados según palabras del propio pianista a la familia, amigos, compañeros, e incluso una de sus favoritas “Aquaman” en referencia a su superhéroe favorito.
Jazz muy bueno que nos interpela desde la primera nota, moderno, contemporáneo, que lo distingue como un referente dentro de esta música.
R:IDJ
lunes, 9 de abril de 2012
UNDERGROUND MAFIA TRIO

Con un relato cuya trama manifiesta una música honda y espesa, el grupo va por un camino cuyo eje melódico pasa mayormente por el trombón, posibilitando aspiraciones y formas que delimitan un espacio concreto en el cual no hay una sola composición que no interese, o que se deje pasar de lado.
Son temas maleables prestos a salir de la escritura original como dispararse para las fértiles tierras de la improvisación.
Tanto Juan Manuel Bayon en el contrabajo como Hernán Rodríguez en los parches aportan sin restricciones ni complejos a una idea que crece a medida que se la escucha.
Un punto destacado del disco es “Para Enrique Norris” una sentida dedicatoria al cornetista Riocuartense, gran compositor, permanente buscador de nuevos lenguajes, un espíritu arriesgado.
Tres músicos que provocan una acertada respuesta al cambio y el cambio produce variedad.
Francisco Salgado: Trombón
Juan Manuel Bayon: Contrabajo
Hernán Rodríguez: Batería
http://www.undergroundmafiatrio.blogspot.com.ar/
R: IDJ
martes, 3 de abril de 2012
ENTREVISTA - MARCO SANGUINETTI

Nació en Buenos Aires en 1973. Es Diseñador Industrial, egresado de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la Universidad de Buenos Aires. Pianista y compositor, uno de los músicos más interesantes del panorama local.
Con tres trabajos en su haber y un lenguaje que se va consolidando en cada uno de ellos, su música plantea una multiplicidad de direcciones, en un juego lúdico que parece no se estanca en una determinada identidad, sino en un sistema de libre asociación que completa el oyente con su escucha. Con ustedes Marco Sanguinetti.
IDJ. Una primera pregunta casi de rigor ¿Contanos como fueron tus primeros acercamientos a la música y a que edad?
MS. En mi familia no ha habido músicos, pero sí amantes de la música. Desde la panza de mi madre he crecido escuchando a los Beatles, que tanto le gustaban a ella, y una vez afuera encontré las voces líricas de miles de óperas que siempre han sido la fascinación de mi padre. Por supuesto, siendo muy chico me acerqué mucho al rock y fui un consumidor de las grandes bandas de los años 70’s y 80’s. A los 9 años insistí caprichosamente con que quería aprender a tocar el piano. Mis padres me enviaron al conservatorio Beethoven, cerca de donde vivíamos, y compraron un piano vertical para mí… se puede afirmar que era un niño bastante malcriado! Estuve sumergido en una intensa formación clásica hasta terminar el colegio secundario. Toda mi infancia y adolescencia tuvo a la música como un lugar íntimo, donde el mundo era perfecto, desde donde volvía a lo cotidiano muy fortalecido en una construcción muy propia. Mi interés fue siempre componer nuevas músicas, y eso hacía, aunque fuera de manera intuitiva.
IDJ. ¿Tus referentes más tempranos?
MS. Bueno… para seguir con la historia anterior… A los 18 tenía un gran dilema vocacional: quería estudiar diseño industrial y también ser músico profesional. En una visita mágica a la casa de Gerardo Gandini, él leyó varias partituras que yo venía escribiendo desprolijamente y me aconsejó estudiar piano con Diana Schneider y composición con Marta Lambertini. Luego, ellas insistieron en que podía ser músico y diseñador a la vez, y sin dudas se convirtieron en mis referentes más fuertes. En esos años de estudio empecé a tocar música del siglo XX y entre todo eso descubrí a Piazzolla. Rápidamente quedé sumergido en el sonido de Ravel, Debbussy, Poulenc, Satie, Bartok, Schönberg, Stravinsky, Cage, Berio, Kagel, entre otros. Todos ellos son “mis” músicos de jazz.
IDJ. Cuando compones que surge primero ¿Armonía? ¿Melodía? ¿U otra idea generada desde otro espacio?
MS. Definitivamente, ni la armonía, ni la melodía. Primero existe una intención climática, algo más conceptual, difícil de explicar, que propone el carácter de la música. Frente a esa intención aparecen muchas respuestas posibles, pero hay una fuerza intuitiva que respeto mucho para tomar un camino acorde a las primeras intenciones. Tal vez por esta dinámica compositiva los críticos y amigos oyentes han vinculado siempre mi música con las imágenes, con el cine, con la danza… y a veces con el diseño.
IDJ. ¿Que aportaron a tú música el teatro y la danza?
MS. Mi sensación al improvisar con bailarines es la misma que al hacerlo con otros músicos. Lo que surge desde el lenguaje corporal de la danza es absolutamente musical y constituye una fuerza inspiradora muy potente. Tal vez lo más interesante de esta relación se de en los silencios, que se manifiestan sobre el movimiento y sobre el sonido de maneras distintas. Participando en las obras, como músico en vivo, me he encontrado atento a mis propios movimientos, como si fuera también un actor en escena, consciente de la influencia de mi cuerpo en la generación de los sonidos… Estoy muy agradecido a la aparición de la danza en mi vida musical.
IDJ. Me interesaría que contaras esa idea tan poco habitual, de compartir la autoría de tus creaciones con los músicos que participan en el proyecto.
MS. Bueno… no es algo que se haya concretado, porque en los créditos sigo apareciendo como autor de los temas. Pero es cierto que no me parece del todo justo. La música que compongo tiene grandes aportes de quienes tocan o bailan, aún sin que estén enterados. Y esto les pasa a todos los que crean algo y lo comparten con otros. Creo que el concepto de “autor” merece un replanteo. También en el universo proyectual del diseño y la arquitectura se da esta cuestión. Yo siento que uno debería incluir como autor incluso a aquellos que han inspirado las ideas de lo que se ha creado. Pero, claro, así la legislación de los derechos sería un gran quilombo… mejor olvidemos este dilema.
IDJ. El hecho de ser Diseñador Industrial y de ser un excelente dibujante (La tapa de los “Los Procesos de Franz” es tuya) ¿Suma a la hora de redondear un proyecto?
MS. No creo que tenga que ver con mi “segunda vida”, la del diseñador. Pero sí con que considero que la grabación de un disco no termina en la concreción del master. Para mí un disco es además un objeto visual y táctil, que debe alinearse con las ideas del proyecto musical. Estoy muy contento con este aspecto en “El otro”. La calidad gráfica y las imágenes de este disco acompañan con mucha coherencia a la música.
IDJ. De los Procesos pasando por Improvisiones y desembocando en “El Otro” tu último registro, solo hay un quiebre; es decir, no hay una continuidad en este último a como venías trabajando en tus dos primeros discos me refiero en la forma de abordarlo estilísticamente. ¿Pensás que tu música va encontrando su propia dialéctica?
MS. Sí, yo voy cambiando y la música será siempre distinta. Incluso, cuando toco en vivo algunos temas de los primeros discos, lo hago de manera diferente. Existe una sensación de estar versionándose a uno mismo. Seguramente, en mi caso estos cambios sean más notables porque me interesa dar con un sonido propio, muy sincero, argentino, fuera de géneros, sin posturas. Entonces me permito revolver en todo tipo de influencias, incluso por fuera de la música. ¿Y si alguna vez me encuentro encasillado en un claro estilo propio?... lo primero que haré será abandonarlo!
IDJ. ¿Que análisis te merece esa búsqueda del jazz moderno alejándose de las habituales re-lecturas de los Standards clásicos e incorporando, como tu caso, canciones de Radiohead, Peter Gabriel o Luis Alberto Spinetta y cual sería el punto de inflexión que media entre lo circunstancial y lo valioso?
MS. Sería muy triste estar haciendo algo circunstancial. No me interesa hacer versiones que no aportan algo nuevo. Cuando interpreto a otro compositor pretendo apropiarme de la música al punto de hacerla mía. En muchas de mis versiones el original es irreconocible, y así es como me interesa que sea.
IDJ. Un viaje, reproductor de MP3 en mano, que es lo que te llevas para escuchar?
MS. La verdad es que tengo muchos discos y de géneros muy diversos. No sé bien por qué, pero sigo comprando originales en vez de bajar música de internet. Incluso en estos últimos años he vuelto comprar discos de vinilo. De todos modos, para dar una respuesta más generosa a tu pregunta (aunque el MP3 no sea lo mío) puedo jugar a seleccionar 10 discos que musicalizarían muy bien lo que se ve a través de la ventana de un tren. Me llevaría: 1) “A thousand evenings” de Dave Douglas, 2) “Yankee hotel foxtrot” de Wilco, 3) “Hail to the thief” de Radiohead, 4) “Cité de la musique” de Dino Saluzzi, 5) “Vienna concert” de Keith Jarrett, 6) “Muito” de Caetano Veloso, 7) las últimas sonatas de Beethoven (op. 110 y 111) tocadas por Daniel Barenboim, 8) “The soft bulletin” de The Flaming Lips, 9) “Kamikaze” de Spinetta, 10) uno mío “Improvisiones”.
IDJ. ¿Como ves la escena actual del jazz argentino?
MS. Es inmensamente positivo todo lo que sucede: grandes músicos bien instalados, muchos conciertos programados, nuevos espacios para esta música, festivales en diferentes ciudades del país, músicos emergentes con mucho talento, publicaciones y críticos atentos a todo. El Real Book Argentino, compilado por Esteban Sehinkman, es una hermosa consecuencia de este afianzamiento. Por supuesto, me gustaría participar mucho más en el circuito, pero a veces quedo aislado porque mi música no responde a los preconceptos del jazz más puro, y es cierto!... Ni siquiera sé si lo que hago puede catalogarse como jazz.
Discografía recomendada:
Los Procesos de Franz – Música original para la obra de danza (Acqua Records)
Improvisiones (MDR Records)
El otro (Acqua Records)
Fotografía: Horacio Sbaraglia
www.marcosanguinetti.blogspot.com
www.improvisiones.blogspot.com
© Impronta de Jazz
domingo, 25 de marzo de 2012
CONTRACUARTETO
Presentamos el Sábado 24 en el programa a esta magnífica agrupación de Chile de nombre : "Contracuarteto". Estos jóvenes demuestran una vez más lo lejos que está el jazz, como forma del arte , de estancarse.
Agradecimiento especial a Cristian Gallardo por su amabilidad y su gesto para con el programa.
Agradecimiento especial a Cristian Gallardo por su amabilidad y su gesto para con el programa.
Andrés Pérez: Saxo
Cristian Gallardo: Saxo, Flauta Traversa
Roberto C. Lecaros: Contrabajo
Félix Lecaros: Batería
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